Hasta el alcance de nuestros mejores conocimientos, sabemos que el surgimiento y evolución de los seres humanos ha estado, desde sus orígenes, íntimamente ligado a los sistemas lacustres. Desde la ocupación temprana de la Garganta de Olduvai por australopitecinos hasta el abandono de la pesca y el inicio de la agri-cultura, los humanos (sensu amplo) hemos explotado este tipo de medio ambi-ente, adaptándonos a los cambios climáticos y ambientales propios de la dinámica natural de la evolución del planeta. No obstante, desde el primer momento en que hemos interactuado con estos sistemas los hemos alterado. En un inicio, las al-teraciones fueron producto inconsciente de la interacción. A medida que nuestras tecnologías y capacidades fueron cambiando, las alteraciones gozaron de un carácter premeditado, que en muchas de las ocasiones sigue preceptos culturales acerca de “lo que es” y “para que sirve” la naturaleza. En la fase actual la co-evolución entre humanos y sistemas lacustres se ve influenciada por distintos usos de suelo, necesidades urbanas contra necesidades rurales, efectos antropogéni-cos y la lógica de distintos sistemas económicos. En ese entendido, este curso hace un recorrido de larga duración para que los asistentes puedan situar su in-vestigación dentro de un momento preciso y bajo un paradigma complejo.